Entró a la UC el 2012 con una mochila cargada de sueños. “Tuve la oportunidad de estar rodeado de grandes compañeros y profesores que hicieron de mis años en la UC una gran época de mi vida”, dice con nostalgia.
Hoy, con 30 años, el cirujano dentista titulado de la Escuela de Odontología UC, recuerda su paso por la universidad y los proyectos en los que participó donde, según cuenta, Odontomóvil lo marcó. “En tercer año tuve la suerte de formar parte del equipo fundador y estar presente en todas las ediciones”, dice.
Tomás Chavarría reconoce que su paso por la iniciativa -que continúa realizándose- fue uno de “los puntos más altos de mi paso por odontología en la UC”. Aprendió a gestionar proyectos y resolver problemas in situ, “y me dio la oportunidad de, aún siendo estudiante, sentir que estaba poniendo en práctica mis conocimientos para ayudar a la comunidad”, reconoce.
Pero su pasión por la odontología no quedó ahí. Durante su paso por la UC realizó una pasantía en Palampur, una región de India cercana a los Himalayas donde la mayoría de los habitantes eran trabajadores de plantaciones de té, por lo que dedicaban gran parte del día al trabajo bajo sol y con escasos recursos. “El dentista de ahí tenía una consulta, así que cuando iban voluntarios, la abría de forma gratuita para que nosotros pudiéramos ayudar a la comunidad”, comenta el doctor Chavarría.
En la consulta se hacían detartraje, exodoncias, restauraciones y más, cuenta el exestudiante: “Las resina compuestas eran muy escasas, por lo que únicamente se utilizaban para restauraciones muy extensas. De lo contrario se usaban otro tipo de materiales, como vidrios ionómeros”, dice.
“Fue difícil. El mayor desafío que encontraba era mantener la salud oral que intentábamos devolver, ya que no muchos pacientes tenían cepillos de dientes, e incluso había algunos sin acceso a agua potable”, asegura tras su regreso de India.
Además de eso, participó en actividades que promovían la salud bucodental en escuelas de la zona: “Una vez a la semana se organizaban idas a terreno. Estas podían ser a jardines o colegios infantiles rurales, o incluso a plantaciones de té, donde hacíamos más que nada extracciones en sillas de plástico”, confiesa.
“Pude ver los distintos flujos de trabajo y cómo adaptar los tratamientos según los materiales que se disponen. Me sirvió para comenzar a internacionalizar mis conocimientos en odontología”, reconoce.
“Además, siempre es gratificante aportar a las personas a través de mi disciplina, pero esta sensación se hace aún más real cuando puedes hacerlo en otros países y darte cuenta de que el nivel de odontología que nos enseñan en la UC es de excelencia internacional”, dice el doctor Chavarría.
La búsqueda de puntos de vista distintos y aprender de nuevas realidades hizo que Tomás buscara una oportunidad de seguir expandiendo su conocimiento en otros países, por lo que, tras egresar en 2018, decidió viajar a Barcelona para continuar con su formación.
En la ciudad española realizó la especialidad de Cirugía Oral en la Universidad Internacional de Catalunya. “Siempre me ha interesado la cirugía oral, pero no me quería alejar de mi área implantológica ni rehabilitadora”, comenta.
En el programa de postgrado, que también mezcla elementos de odontología digital, conoció a docentes y estudiantes de países como Iraq, Grecia, Israel, México, Italia, Inglaterra, Francia, entre otros, por lo que sigue buscando nuevas experiencias de internacionalización de su carrera.
Ahora, tras regresar del país ibérico, el doctor Tomás Chavarría se dedica a su área de especialización, complementando con los programas académicos a través de plataformas como ITI y EAO. Sin embargo, reconoce que la docencia es un área en la que le gustaría experimentar: “Me gustaría ser un aporte en el desarrollo de nuevos profesionales, y que juntos sigamos aportando en los desafíos que existen en la odontología, tanto a nivel nacional como internacional”.
